miércoles, 9 de septiembre de 2009

Idea...



Hace poco Bananorama cumplió CUATRO AÑITOS!!!
Que los cumplas feliz! Que los cumplas feliz! Que los cumplas que los cumplas que los cumplas feliz!!!

Ultimamente estoy bastante falta de inspiración. Asi que prefiero intentar un post con contenido cuando de verdad merezca.

Arrivederci

Una idea vagaba sola, solita, por el alfeizar de mi ventana.
La vi y me pareció tan linda, tan tierna que decidí simplemente mirarla.
Mirarla y dejarla ser. Dejarla ser y crecer.
Probablemente debería haberla agarrado, como cualquiera hubiese hecho, pero no quise coartar su libertad.
Por las noches la dejaba entrar a mi cuarto, ya que es bien sabido que un clima cruel no es bueno para las ideas. A veces dormía conmigo en mi almohada, otras veces en mi mesa de luz.
Durante el día charlabamos, o simplemente me divertía viendola bailotear; llenando de luz todo lo que veía a su paso.
Ella y yo nos quisimos mucho. Nos cuidabamos.
Un día mientras dormía -no recuerdo bien como fue- ella se fue.
Sin despedirse, sin abrazarme, sin darme aunque sea un último rayo de su luz.
Solo se que sentí un golpe, y al despertarme ella ya no estaba.

Mucho lloré por mi idea perdida.
Y al pasar los días y las semanas, regresó.
Me explicó que a veces las ideas necesitan irse lejos, salir de la monotonía, o de otra forma se apagan y se convierten en recuerdos; lo que mas teme una idea.
Entonces así era: Ella venía, se quedaba, y pasado un tiempo se iba para retornar luego....

To be continued...

jueves, 23 de julio de 2009

No quiero...


No estoy muy segura de nada ultimamente.
Ayer por primera vez vislumbre la mas real de las posiblidades. Los seres humanos creemos lo que nos conviene y nos gusta mucho autoengañarnos.
Ah! Me duele tanto... No tenés idea...

Se que tengo que hablarlo contigo.
Se que si, pero tengo terror a lo que pueda suceder. No. Tengo terror a lo que VA a suceder.
No quiero que te vayas de mi casa por ultima vez.
No quiero saber que no me vas a dar mas besos y no vamos a estar mas juntos.
No quiero saber que no nos vamos a llamar y hablar horas nunca mas.
No quiero renunciar a mi mejor amigo.
No quiero ir al ensayo y ser solo un 2do violín de algún lugar de la fila, y que vos seas un 1ero desconocido.
No quiero que encabeces mi lista de fracasos.
No quiero que seas uno mas de todos los nombres de gente que quería y perdí por inútil, y definitivamente no quiero ser una mas de las minas que te garchaste.
Y eso es lo que va a pasar.

Nos vamos a abrazar. Yo voy a llorar. Mucho. Vos por supuesto que no.
Me vas a decir que me queres. Yo te voy a decir que te adoro y que sos una de las personas que mas he querido hasta ahora.
Te vas a ir. Yo voy a quedarme paradita en el escalón de la puerta de casa mirando como te vas (como siempre hago), solo que esta vez va a ser la última. Y mientras te vas sin mirar para atrás (como siempre haces); rogando por que te des vuelta, yo voy a sentir que me muero.
Voy a sentirme la persona mas sola del universo. Un fracaso.
No te voy a mandar mas mensajes de texto. Ni uno de los miles que te mando a diario. Vas a pasar a ser un nombre en mensajes de texto viejos, de cuando estaba todo bien, que voy a leer y releer sin tener el coraje para borrar. Voy a sobresaltarme cada vez que mi celular suene, para luego decepcionarme y sentirme muy boba al ver que no sos vos, y acordarme de por que.
Cuando el martes llegue al ensayo me voy a dar cuenta de que en cuestión de unos días, nos convertimos en "compañeros de orquesta" si es que eso no es hasta demasiado. Te voy a mirar, y ver tocar y se me van a llenar los ojitos de lágrimas. Voy a ser la primera en irme, para que no me veas las lágrimas, y para que no compartamos el camino. Voy a llorar todos los martes y jueves, cada vez que pase por durazno y magallanes de regreso a casa.
Todos los viernes me voy a acordar de que ibas a casa a comer pizza cuando estaban las cosas bien, y pensar que si yo no hubiese arruinado todo, quizás estarías comiendo en el sillón de casa y tomando pepsi, contándome que tal el ultimo disco de Coldplay o escuchando de mi ultimo conocimiento al pedo; riéndonos.
Cada sábado me voy a preguntar que estarás haciendo, o con quien estarás; me voy a preguntar si habrás conocido a alguien. Me voy a preguntar por que tuvimos que terminar así, si yo te quería con toda el alma, y me merecía ser querida... Que habré hacho mal??
Voy a tratar de convencerme de que no valés la pena, cuando se muy bien que es mentira.
Cuando tenga un mal día o un problema va a ser doble el dolor: por el problema en si, y porque no tengo a mi mejor amigo para contárselo.
Voy a rezar todo el tiempo a todos los dioses en los que no creo para que por favor no me hayas olvidado y que, como un héroe, te aparezcas ese mismo día en mi casa, sea la hora que sea, a salvar lo poco que quede de relacion. No va a suceder.


Va a pasar el tiempo. Al cabo de unos cuantos meses de esta tortura, de a poco te voy a ir superando. Cuando la herida cierre, me voy a haber convertido en alguien como vos. Alguien que no quiere querer, porque no quiere que le hagan tanto daño otra vez. Detesto esa perspectiva.
Luego vamos a ir desapareciendo lentamente de la vista del otro: Vos vas a tocar algún lado en el cual yo no voy a dirigir, ni tocar y viceversa. (si es que logro dirigir algun dia...)
De a poquito así nos vamos a ir olvidando... Vos vas a ser un nombre mas en la lista de fracasos. Es mas, vas a ser el motivo por el cual yo no me la juego por nadie. Yo voy a ser una mas en la lista de las que te garchaste.
Y probablemente un día nos reencontremos en algún que otro concierto y nos saludemos apenas reconociendonos, como dos tristes desconocidos, y sigamos cada uno su camino. Tristes desconocidos, que, con una mínima vuelta de tuerca en el libreto, podrían haber terminado de otra forma.
...Quizás en otra vida nos vaya mejor...

Te voy a extrañar



Arrivederci
Ms. M


Cancioncitas


Dos temas.

1) I'll Cover You (Rent) - Hubiese sido tan lindo que asi fuera...
2)Estrellitas y Duendes (Juan Luis Guerra) -
Hubiese sido tan lindo que no fuera cierto...


1)

Live in my house,

I'll be your shelter,

Just pay me back
WIth one thousand kisses
Be my lover and
I'll cover you


Open your door,
I'll be your tenant
Don't got much baggage to lay at your feet

But sweet kisses I've got to spare

I'll be there and I'll cover you

I think they meant it when they said you can't buy love
Now I know you can rent it
A new lease you are my love, on life
Be my life Just slip me on, I'll be your blanket
Wherever,whatever,
I'll be your coat
You'll be my King, and I'll be your castle
No, you'll be my Queen, and I'll be your moat

I think they meant it when they said you can't buy love

Now I know you can rent it
A new lease you are my love, on life
All my life
I've longed to discover
Something as true as this is
So with a thousand sweet kisses,
I'll cover you

With a thousand sweet kisses,I'll cover you,

When you're worn out and tired,
When your heart has expired

If you're cold and you're lonely

You've got one nickel only
With a thousand sweet kisses, I'll cover you,
With a thousand sweet kisses, I'll cover you

2)


Viviré en tu recuerdo
como un simple aguacero
de estrellitas y duendes.

vagaré por tu vientre

mordiendo cada ilusión.

Vivirás en mis sueños

como tinta indeleble
como mancha de acero.

no se olvida el idioma
cuando dos hacen amor.
Me tosté en tus mejillas
como el sol en la tarde.
se desgarra mi cuerpo
y no vivo un segundo
para decirte que sin ti muero.
Me quedé en tus pupilas mi bien
ya no cierro los ojos.
me tiré a los mas hondo
y me ahogo en los mares
de tu partida, de tu partida.

Andaré sin saberlo
calzaré de tu cuerpo
como huellas en hierro
comeré lo que sobre
dentro de tu corazón.
Y seré un mar desierto
una frase silente
la elegida de un beso
un planeta de celos
esculpiendo una canción.

Me tosté en tus mejillas
como el sol en la tarde.
se desgarra mi cuerpo
y no vivo un segundo
para decirte que sin ti muero.
Me quedé en tus pupilas mi bien
ya no cierro los ojos.
me tiré a los mas hondo
y me ahogo en los mares
de tu partida, de tu partida.





lunes, 1 de junio de 2009

Fine

Todo se termina. Nos guste o no.
Algo se terminó hace poco para mi, y no se si es para bien o mal, pero fue algo importante para mi.
Por lo tanto, y con el perdón de muppet-madmoiselle, voy a publicar estos dos pequeños movimientos no musicales (El primero lo escribi hace tiempo pero me pareció muy pelotudo, el otro ayer) a modo de despedida.


I Allegro. Ostinato espressivo

Quiero verte.
Pero no quiero querer verte. No quiero querer verte para nada. Aunque quizas en realidad tampoco quiera verte en primer lugar. Si, es eso. Por que querría verte yo? No tengo nada para decirte ni gritarte, ni quiero abrazarte ni golpearte. No me aportaria nada verte, no me quitaria nada no verte.
No obstante puede ser que quiera verte sin motivo alguno y por eso mismo generar el no querer verte; es decir que hay una posibilidad de que quiera en realidad verte y que no quiera querer verte como fue primeramente especificado.
No entiendo mucho... pero no tiene sentido que quiera verte sin motivo alguno. No existe tal cosa. O sea que si quiero verte o si no quiero verte, tiene que ser por algun motivo. De la misma forma querer querer verte o no querer querer verte tambien debe de tener alguna explicación.


Pero quiero verte. Quiero verte y hablar contigo, y que me hagas reir. Quiero pelearme contigo como siempre y decirte cualquier cosa. Abrazarte, y que me des ese beso que me gusta.... que siempre me gusta... y que sabes que me gusta porque a vos te gusta tambien.
Y ahora no se... Estoy como perdida, como triste, como esperando... eso es, como esperando. No se que pasa y no entiendo nada. No me gusta no entender... no podría ser todo mas fácil?


II Finale: Adagio Lamentoso.


Tengo tu olor en mi ropa. En mi pelo.
Tengo tu olor, y eso es todo lo que me queda de vos.
A partir de hoy ya no nos conocemos.
Somo dos, no uno; y uno no seremos nunca mas.
Siento tu olor y recuerdo,
y te extraño, y te siento.
Una vez se vaya voy a quedar sola,
sola con recuerdos, un lapiz y un violín adolorido, vacío.

Nunca pensé que fueras a causar esto.
Algo así.
Tan grande.
Tan inmenso y poderoso, capaz de atravesar todo,
hasta mi propia piel, mi carne.

Pensé que no era nada.
Creí que era solo un juego.
Sin embargo te estás yendo, te estas yendo
y te veo.
Te veo de lejos y no miras para atras.
-Volvé!- No me oís.
Te fuiste.
Te fuiste y te llevaste todas mis semicorcheas.
Dejaste mi mundo en silencio,
y no hay mas música para mi.

Esta vez es realmente el final.
Me duele!
Todo lo que era nunca realmente fue.
El imperfecto engranaje que calzaba
perfectamente con mi imperfección...
Nunca existió...
Yo estaba equivocada.
La culpa fue mia, yo entendí mal.
Ahora lo se.
Perdón!
Por favor volvé! Por favor...
Clemencia. Piedad.

Volvé!
Devolveme tus besos y tu olor!
Quiero darte toda la música en mi cabeza y en mi alma.
Que la escuchemos juntos...
Lo que vos quieras, pero volvé...
Volvé y decime que era mentira,
que querés y que somo uno de nuevo.

Se va tu tren.
Yo me quedo acá, en el otro lado del mundo.
Tus ojos marrones me buscan simpáticos.
Mis ojos azules no paran de llorar.
Me abrazas.
Y te vas...
Te vas, me voy.
Nos saludamos de lejos.
Nos queremos...
Nos queremos?
Te vas.
No te pude decir nada.
Todo lo que no te dije...
Que me encantan tus besos,
que tus manos me enloquecen.
Que me haces reir!
Que te quiero.
Te quiero!

Si hubiese sabido,
si tan solo hubiese sabido
que ese iba a ser el último beso,
nunca te husbiese dejado ir.
Jamas te hubiese soltado.
Si hubiese sabido que ese abrazo,
ese instante perfecto,
no se daría nunca mas,
me hubiese aferrado a tu piel,
para estar así siempre.
No sabía.
Te perdí.



...No me olvides...
Ms. M

martes, 12 de mayo de 2009

Aniversario....

Hace exactamente 356 días que cambió mi vida...
No se como sucedió, no se por qué ni cómo.
Solo se que ese día, ese día que hoy cumple exactamente un año, marca un quiebre rotundo con tiempos de antaño.
Ese día me hizo incursionar en mundos incríbles, sueños grandiosos, horizontes inalcanzables y sin mencionar, conocer personajes inolvidables.
Me trajo problemas, inseguridades y angustia, como todo en la vida... Mucho trabajo, día por día. Pero al momento de hacer cuentas, la alegría recibida cada día mas aumenta.

Me trajo un amor... con quien todavía no conozco el final del cuento. O mejor dicho, me trajo dos.

Gracias!!!

Arrivederci
Ms. M





domingo, 12 de abril de 2009

Crónica de un dúo anunciado


Era nuestra primera vez. Luego de tanto ensayar (en realidad: mentirnos a nosotras mismas pretendiendo que ensayábamos) había llegado el día de nuestro debut como dúo musical: una actuación de 30 minutos o poco más en una reunión de fin de año entre los socios de un club muy “chic” de la ciudad, ubicado en un edificio de la Ciudad Vieja. Por supuesto que era una actuación honoraria… no podíamos pedir más siendo que no teníamos ninguna experiencia como dúo; de cualquier manera íbamos ilusionadas esperando recibir una gratificante cena como pago, y un buen vino a la altura de la cena.
Ese día se me había presentado entreverado, pero mi cabeza estaba clara: había conseguido resolver muy bien el examen de armonía que tenía esa mañana, en el cual había tenido que hacer más cuentas y escribir más números que en cualquier ordinario escrito de matemática en mi vida. En ese aspecto nos asemejábamos con la otra integrante del dúo, que dos días antes había conseguido salvar el último examen de matemática del liceo, para tranquilidad suya y mía (omití aclarar que la realización de esta actuación estaba supeditada al resultado de su examen: en caso de perderlo, su violín, por resolución de su madre, iba a terminar roto en el contenedor de la puerta de su casa con arco incluído, y nuestro dúo iba a verse disuelto sin siquiera haber debutado).
Habiendo llegado a mi casa al mediodía comencé a recibir los mensajes de mi compañera preguntándome por mi paradero. Ya entonces se encontraba en estado de shock (para ella era la primera vez que iba a tocar el violín en público). Un poco más tarde de lo que habíamos acordado (una o una hora y media después) abrí la puerta de mi casa para salir, recibiendo en mi cara el soporífero calor reinante en el exterior. Estando ya instalada en el taxi, con el teclado en la valija y el amplificador a mi lado (el cual exhibía un elegante pegotín con la inscripción “me cago en la cumbia”) recibí una nueva llamada de la susodicha violinista, increpándome por mi tardanza. La tranquilicé informándole que ya iba rumbo a su casa. Al llegar encontré a la muy hipócrita todavía sin vestir, con el pelo mojado, el violín sucio y fuera de su estuche, y las partituras desparramadas por el piso de su cuarto. En un día normal le habría dado a conocer como siempre mi opinión acerca de su desorden y los gérmenes en su cuarto, pero ese día no lo hice porque comprendía sus nervios… y debo admitir que a esa altura yo también los compartía… un poquito… De todas maneras ambas habíamos comenzado a sentir la adrenalina que se produce cada vez que estamos a punto de hacer algo que, sabemos, va a ser terrible.
Al llegar al club me sorprendí: el lujo a mi alrededor era mucho mayor a lo que me esperaba. Apenas entramos (por una puerta que daba a la plaza, por la cual seguramente había pasado mil veces antes pero que nunca había visto) nos atendieron muy amablemente, estando todos los empleados al tanto de nuestra llegada, no así de nuestros instrumentos (¿qué traíamos dentro de los estuches? ¿una guitarra chiquita? ¿un piano de verdad? ¿un muerto?). Intentamos ensayar un poco en la sala donde estaba destinado que tocaríamos pero luego de un rato decidimos terminar con el ensayo ya que de continuarlo mi amiga habría colapsado de un ataque nervioso al ser cada vez más evidente que las notas que tocaba se iban alejando progresivamente de su afinación original. A mí me ponía nerviosa también un mozo que pasaba insistentemente por delante nuestro y nos sonreía como quien sonríe a alguien que le inspira lástima. Fue ahí que decidimos que lo más productivo iba a ser alejarnos por un rato de ese lugar y llenar nuestros estómagos con algo de comida.
Afuera ya estaba atardeciendo y el clima estaba ideal. Mientras comíamos aceleradamente (ya que otra vez se nos había hecho tarde) discutimos, más o menos en buenos términos, acerca de a quiénes invitaríamos a nuestra segunda actuación que tendría lugar, milagrosamente, esa misma noche. El hecho milagroso en realidad no era que la otra actuación fuera el mismo día, sino que realmente existiera otra actuación, a lo que luego se le sumaría otro milagro: que luego de la primera experiencia siguiéramos insistiendo en la idea de realizar la segunda actuación. Al término de dicha discusión, y fundamentalmente a instancias mías, acordamos que no invitaríamos a ninguno de nuestros amigos que tuviera un mínimo de conocimiento o gusto musical.
Cuando volvimos al club notamos que los invitados a la reunión ya estaban llegando, y que la mayoría de ellos superaban la esperanza de vida de nuestro país así como también el promedio de cirugías plásticas per cápita. Nos apoderamos del baño y comenzamos a peinarnos y maquillarnos para mejorar nuestra imagen (si es que eso se puede considerar posible), pensando que de esta manera conseguiríamos distraer la atención de nuestros espectadores durante, al menos, la primera parte del espectáculo. Luego me arrepentiría enormemente de esta idea: tuve que vigilar constantemente mi escote mientras tocaba ya que las miradas que recibía de algunos caballeros presentes me hacían sospechar que mis atributos mamíferos se habían rebelado y puesto en exposición fuera de mi ropa, sospecha que afortunadamente nunca resultó cierta. Creo que esta también fue la razón por la cual el momento que transcurrió luego de que fuéramos presentadas (presentación que, se suponía, no iba a existir), en el que cruzamos todo el salón hasta llegar al lugar donde habíamos dejado nuestros instrumentos, resultó eterno.
Al fin estábamos instaladas en nuestros lugares e íbamos a comenzar nuestra primera actuación. Los asistentes, perfumados y enjoyados barrocamente, estaban expectantes. Miré a mi amiga y sorprendentemente su cara no era de terror sino de seguridad. De todas maneras esa seguridad se esfumó rápidamente al comenzar el primer tema de nuestro repertorio. Este era “Hey Jude” de los Beatles. Tal como habíamos acordado toqué el “do” con el que comenzaba el tema para que mi compañera lo afinara, así como luego toqué otras notas para disimular esta aberración (aproximadamente unas ocho o diez notas más hasta que ella me miró con cara de “¡basta!”). Igualmente el primer sonido que salió de su violín no se correspondía con ninguna de ellas, ni con ninguno que yo hubiera escuchado antes.
Ese fue tan solo el primero de los contratiempos que tuvimos. Ella había empezado a tocar tan bajito que yo apenas la oía. Empecé a decirle entre dientes “¡más fuerte!” pero no estaba segura de que me escuchara: su mirada estaba clavada en la hoja que tenía delante en el atril, y daba la impresión de que era la primera vez que veía esos extraños símbolos que ahí habían y decían llamarse “notas”. Cuando me quedaba alguna mano libre trataba de manotear el amplificador y bajar el volumen de mi teclado, pero el resultado siempre era peor: cuando no se me movía el atril y se me caía la partitura, bajaba tanto el volumen que ni yo me escuchaba, permitiendo a su vez que se escucharan con más nitidez los sonidos que ella sacaba desesperadamente de su violín.
Cuando terminamos el primer tema juntas (ignoro cómo ya que en determinado momento me di cuenta de que yo estaba tocando una parte que se encontraba a varios compases de distancia de la que estaba tocando ella) sonreímos y recibimos numerosos aplausos. Ahí nos miramos pensando que lo peor ya debía haber pasado.
Por supuesto que estábamos equivocadas. En los temas que se sucedieron conseguimos milagrosamente potenciar aún más todos los problemas que habíamos tenido en el primero (la distancia de algunos compases de desfasaje en “Hey Jude” la ampliamos a varias páginas en “Fly me to the moon”). De cualquier manera siempre recibíamos numerosos aplausos y felicitaciones, confirmando mi sospecha de que nuestros ocasionales espectadores cumplían con la condición de poseer escasos conocimientos musicales, o más exactamente: nulos. También ayudaba el promedio de edad de la sala (que seguramente se correspondía con una capacidad auditiva disminuída), y la cantidad de litros de whisky que corrían entre los invitados (que se correspondían con unos aplausos cada vez más enfervorecidos).
Creo que fue el whisky lo que motivó el momento más bizarro de la noche: encontrábame yo por comenzar el hermoso solo de “Alfonsina y el mar” cuando siento que alguien se sienta a mi lado. En principio no me inquietó demasiado, así que decidí continuar tocando sin mirar a mi costado. Luego la situación se tornó insostenible cuando esa persona comenzó a hablarme, alabándome por mi manera de tocar (ahora que lo pienso evidentemente fue el whisky lo que motivó esta escena). Los nervios hicieron que el hermoso solo se convirtiera en un montón de notas sin ninguna relación tonal que se sucedían cada vez más rápidamente. Terminé a los manotones con el teclado, y di por finalizada mi parte en un acorde que me sonó muy extraño, pero eso, luego de lo anterior, ya no tenía ninguna importancia. En ese momento miré a mi amiga suplicándole que empezara a tocar. Sin embargo ella demoró en entrar porque tenía el violín apoyado en la falda y no estaba preparada: había estado muy entretenida admirando el color rojo que había tomado mi cara en el transcurso de mi solo.
Fue así que llegamos al final de nuestro repertorio. A pesar de todos los contratiempos creo que tuvimos algunos buenos momentos durante el espectáculo (ahora no me acuerdo de ninguno, pero estoy segura de que los hubo…). Habíamos reservado nuestros dos mejores temas como bis: eran dos tangos, “La última curda” y “Volver”, que la violinista (también cantante) iba a interpretar, y yo iba a acompañar. Como era previsible, dado el nivel de alcohol en la sangre de nuestros oyentes, estos tangos fueron un éxito. Mi amiga recibió numerosas felicitaciones por su voz, lo cual hizo que los insultos que les profiriera más tarde, cuando ya estábamos las dos solas, fueran más numerosos aún que las felicitaciones, ya que consideraba que de esta manera habían querido desalentarla subliminalmente en su carrera violinística.
Cuando ya me estaba parando detrás del teclado, dando por finalizada mi intervención en la reunión, entré en pánico al notar que los asistentes que habían consumido más whisky se habían envalentonado y vociferaban nombres de tangos y zarzuelas (la mayoría desconocidos para mí) que querían cantar, pretendiendo que yo los acompañara. Sabiendo que eso era imposible dada mi capacidad musical me acerqué a mi amiga y le rogué que anunciara que nos teníamos que ir rápidamente porque teníamos otra importante actuación por delante, lo cual a esta altura yo ya ni sabía si era cierto o no. Recibidas las manifestaciones de congoja de todos por nuestra pronta partida nos dispusimos a guardar nuestros instrumentos y dirigirnos a la puerta que conducía al hall de entrada. Ya en el hall nos olvidamos de nuestro apuro cuando uno de los mozos nos ofreció una cena en el balcón de otro salón del club, el cual tenía una preciosa vista a la plaza. Cuando salimos al balcón notamos que el día ya se había convertido en una noche de verano hermosa. Nos sentamos tranquilamente y el mozo comenzó a traernos distintos platos. Tal como era previsible la comida era tan elegante que no pude distinguir ninguna de ellas (podía estar comiendo crepes con carne de conejo, caballo o cocodrilo; era lo mismo para mí).
Ahí estuvimos como una hora o una hora y media, hasta que nos dimos cuenta de que no podíamos dilatar más nuestra ida al boliche en donde teníamos la segunda sesión anti-musical de la noche. En el taxi nos fuimos tranquilizando pensando que como era miércoles seguramente habría poca gente, pero al llegar vimos nuevamente rotas nuestras esperanzas cuando advertimos que había tanta gente en el boliche que habían puesto un montón de mesas afuera que ocupaban gran parte de la vereda. Cuando terminamos de bajar los instrumentos del taxi la gente nos empezó a mirar. A esa altura lo único que quería hacer yo era cavar un pozo en la vereda para enterrarme, pero mis probabilidades de conseguirlo eran casi nulas. Afortunadamente mi compañera encontró a un par de amigas que habían ido a vernos, así que nos sentamos con ellas. Con la excusa de que estábamos cansadas por la anterior actuación conseguimos que nos dejaran descansar un rato ahí sentadas, tomando algo. Nuestra verdadera intención era hacer tiempo para que se hiciera tarde y la gente comenzara a irse.
Luego de bajar algunas jarras de vino entre las dos para superar el momento, nuestro deseo se hizo realidad: cuando advertimos que sólo quedaban aproximadamente 20 personas presentes en el lugar (contándonos a nosotras, las amigas que habían ido a vernos, las mozas y el dueño) decidimos que ya era momento de actuar. Nos ubicamos dentro del boliche, y al prender el teclado noté los estragos que el vino había provocado en mi vista y, fundamentalmente, en mi cabeza. Creo que era por esto que todo me resultaba tan divertido y entusiasmante en ese momento, al punto de decidir tocar algunos temas de memoria para incrementar la sensación de adrenalina (memoria que en ese momento no se encontraba disponible). Creyéndome, entre todos mis delirios, un as de la improvisación, comencé a tocar lo que para mí eran los acordes de “Imagine” (que por supuesto no lo eran), logrando que ahora fuera mi amiga la que me mirara a mí con cara de consternación y pánico. De cualquier manera esta fue para mí una actuación mucho más feliz que la anterior ya que mi estado etílico hizo que mi percepción relativizara los grandes contratiempos que tuvimos, convirtiéndolos en simples percances sin importancia.
Nuestro pago aquí consistió en una nueva jarra de vino (por si las anteriores no hubieran sido suficientes). El dueño del boliche, que se sentó con nosotras porque ya no tenía ninguna mesa que servir (nuestra actuación se había encargado de que el local se vaciara), amablemente nos invitó a no ir nunca más a tocar allí, diciéndonos que lo que hacíamos era música “más acorde a otro tipo de lugares, como restaurantes de hoteles, para que la gente se regocije escuchándola mientras come”….
A pesar de este eufemismo, esa noche ambas nos acostamos tranquilas y contentas. Sabíamos que no habíamos hecho ningún aporte valioso a la escena musical montevideana (más bien todo lo contrario), pero nos habíamos sacado el gusto de hacer juntas lo que queríamos, lo cual nos iba a ligar para siempre en nuestro recuerdo.

EPÍLOGO

Este dúo, sin el menor sentido de compasión por la salud psico-emocional de sus allegados y demás infelices, continúa persistiendo en su intento de hacer música, y actualmente se encuentra ensayando un nuevo repertorio para atormentar ocasionales futuros espectadores.
Los esperamos en nuestra próxima actuación.

jueves, 9 de abril de 2009

Esperando

Apenas me tomé el ómnibus que me llevaría a mi casa me senté en un asiento de esos del montón y comencé a pensar en esa noche rara que estaba terminando para mí.
Estaba terminando por mi culpa; yo lo había decidido. Sin embargo ahora no podía evitar cuestionármelo. Me sentía culpable por lo que había dejado atrás, ¡pero sabía que tenía derecho a serlo! Estaba muy decepcionada... pero me sentía cruel... mala...

Fue entonces que lo ví desde la ventana, serio, esperando, sentado solo en un banco de la plaza abrazado a su mochila negra. ¿Qué esperaba? Todavía no sabía. Hacía media hora (¿o una hora...?) que nos habíamos separado en la parada, la misma en la cual yo había llorado sola aquella vez, cuando sentí que nuestra amistad se había acabado, hace tiempo ya.
Al verme a mí, sentada también sola en el ómnibus vacío -a no ser por el chofer, el guarda, y un par de tipos que dormían como si no pasara nada, porque esa noche realmente no pasaba nada fuera de mí- me sonrió, y la sonrisa le iluminó su cara, y la mía.
Ahí comprendí que todo iba a estar bien; que yo estaba bien; que él estaba bien. Quizás era eso lo que estábamos esperando ambos, sin saberlo.
Realmente no había perdido nada, porque no tenía nada que perder.

lunes, 2 de marzo de 2009

Semáforo


Esta vez no viajaba en el 104, sino que caminaba por la cuadra de mi casa. Llovía mucho, realmente llovía mucho. Nuevamente mi atención se centro en la gente. La gente.
A diferencia de la vez pasada, los noté totalmente estáticos. El agua cayendo del cielo había paralizado a todas estas personas, empujándolas debajo de balcones o suerte de techos protectores de este líquido amenazador. (Nótese que este era AGUA).
Esta vez yo era completamente dinámica. Mi cabeza llena de locuras sobregiradas y proyectos e ideas. Estaba desbordante de felicidad y energía. Por una vez el mundo estaba quieto y yo le había ganado la carrera.
Aquellos individuos estáticos estaban molestos. El fluido nocivo que caía del cielo los mojaba, su ómnibus no venía, y quién sabe cuantas miles de cosas apuradas y frenéticas tenían que hacer. Tenían motivo para estar molestos, su rutina estaba rota, el mundo se había encontrado con un semáforo en rojo.
Llegué a mi casa y me dispuse a comer algo antes del ensayo.
Cuando abrí la puerta para irme noté que había salido el sol, y todo se había dispuesto como estaba antes.
-Cuanta celeridad en esta tierra.- Pensé yo suspirante.
Llegué tarde, y me di cuenta que nuevamente todo había vuelto a la normalidad.
Pero hoy no me importa.

Arrivederci
Ms. M

Ver 1era parte: "Ómnibus"----> http://lebananorama.blogspot.com/2007/10/mnibus.html

martes, 13 de enero de 2009

Saludo Muppet-afectuoso a todos los lectores de Bananorama

Buenas nuevas!
Aquí les escribe esta nueva editora de este monumental blog... Lamento el retraso desde el anuncio de mi adherencia hasta ahora, pero es que la vida no es fácil en estos momentos (sí, soy emo, y qué?).
En estos momentos no tengo mayores reflexiones que ofrecerles, sobre todo por el hecho de que el tiempo me está apretando cual pantalón de Howard Wolowitz. Sí les voy a dejar una reflexión de un tal fulano, Oscar Wilde se llama, que me parece atinada para la situación, y también una foto que me favorece más que aquella que publicó Ms. M en el anuncio de mi adherencia, la cual fue igualmente bienvenida Muppet-afectuosamente.

Au revoir!
Muppet-mademoiselle
"El arte de la música es el que más cercano se halla de las lágrimas y los recuerdos"
Oscar Wilde


viernes, 2 de enero de 2009

Tarde




Corría el día con una prisa impaciente, parecía no querer esperar a la noche.
Mientras tanto las gotitas de lluvia caían felices en mi ventana como pequeñas perlas húmedas.
Yo miraba. El cielo no lucía tormentoso, simplemente aburrido, gris y aburrido. En el parque las flores sonreían coloridas como jamas las había visto antes. Nuevas, limpias, puras. El olor en el aire me llevaba a un lugar verde y alejado; ese olor a naturaleza y humedad típico de los días de lluvia.
La calle estaba absolutamente desierta; el calor y el agua habían alejado a todos los peatones. A pesar de ello veía a algún caminante pasar ocasionalmente, siempre triste y apurado. Con un ritmo característico de los habitantes del nuevo mundo.
Las corcheas y fusas dibujadas en las hojas daban la impresión de querer saltar de su lugar en el pentagrama, con ansias de convertirse en música por si solas sin necesidad de ser leídas.
Todo lo que me rodeaba presumía celeridad, ansiedad e impaciencia. No obstante, mi calma y tranquilidad poco características permanecían intactas.
Me recoste entretenida con el danzar de las figuras de mis partituras y simplemente me puse a pensar. Pensar en como todo había cambiado, pensar en las paredes de mi cuarto, pensar en las sombras de la lámpara, pensar en el tres de Mozart... Simplemente pensar.
Fugaz como un rayo un pensamiento se cruzo por mi mente.
Pensé en vos.
Rápidamente me incorpore y mire a mi alrededor. La lluvia había cesado para dar paso al sol, los autos circulaban en forma desmedida, las corcheas y las fusas lucían aburridas y estáticas, y hasta las flores habían perdido protagonismo. Todo había vuelto a la normalidad, incluido mi estado de ánimo.
Me paré y abrí la puerta del cuarto, bajé las escaleras corriendo y abrí la pesada puerta de entrada. El ruido me abrumó. Corrí y corrí hasta que no pude correr mas, entonces caminé, prendí un cigarro y trate de recuperar el paso. Me tropecé con una baldoza rota y me reí de mi torpeza, aunque rápidamente recordé mi objetivo inicial. Me había convertido en una nuevomunidsta mas, apurada y alterada.
El sol brillaba como nunca. Miré a mi alrededor y seguí caminando.
Hasta que llegué.
Y cuando llegué, caí en la cuenta de que era tarde.
El sol brillaba como nunca, pero en mi interior llovía... Como siempre.
Porque era tarde.
Porque el mercenario reloj de la vida me habái vencido nuevamente. Porque me di cuenta.
Porque te quiero... Pero era tarde.

Reflexion de fin de año



Hablaba hace poco con una de mis ahora dos lectoras asiduas, de como encarar el termino del año y el comienzo del siguiente. Ella me comento que todos los años, en cada 31, escribia las reflexiones de los eventos sucedidos en el año que despedia. Yo lo habia hecho un par de veces, pero no todos los años. Este año decidi hacer un par, ya que ha sido un año sumamente importante para mi. Antes de que se termine el año (ya que queda muy poco) voy a hacer una breve, brevisima reflexion, aca en el blog, en la que voy a señalar los highlights de cada mes, las cosas que me marcaron, las personas que me marcaron.

Empiezo(trate de respetar el orden cronologico, pero no es del todo correcto, sobre todo en la mencion de las personas) :

Enero, Aguas dulces, Caipirinha, Tabaco, Rochi, Maru, El clusss!!!, Oreja Mutante, Valizas, Las dunas del Cabo, Sirilo, Cumple de Mato, Eli, Luli, Maru, Ale, Mathias... Febrero, Examenes,Mate, Cumpleaños de Jorge, Mi abuela ebria.... plotch, Mi cumpleaños, Cumpleaños de Mayra, No mas esgrima (Auch), Festival de Jazz en cinemateca, Rochi, Traduccion del corto, Tabaco... Marzo, Facultad de Ciencias, Mer, María, Lucia, Laura, Muchas risas, Chistes cientificos, Coro de la Fcien, Festejo de los 15 años que en realidad eran 14(todo es valido para salir de joda), Lanzilotta... Abril, Examen(perdido), Cenas con Maru en ponte veccio, No mas facultad (Doble auch)... Mayo, Destaoriyaaaaaa!!!, Claudio (gran docente gran), Violin, Toque en union Latina (tsunami de auchs...destruccion emocional, momento plotch: Ay no, estas casada?, Entonces tenemos que salir. Perdona, pero estoy saliendo con otra... plotchplotchplotch), Verdi, Junio, Hot Club!, Violin, Mozart, Lucas Terry (seguimos barriendo abajo de la alfombra los momentos bizarros) limites y derivadas, Eduardo(otro gran docente), Mate, Rossini, Entrevistas varias, German (terrible aguante de cabeza!), La clave (de comunicar), Mayra(pianista/muppet favorita, terrible amiga)... Julio, Maru, Examen(perdido), Pluna, Violin, Piazzolla, Cigarros, Mucho sueño, Zitarrosa(x2), Laura(excelente amiga, fantasticas charlas, tremendas comidas!)... Agosto, Audicion, Cumple de Felipe, No mas pluna (auch),Sibelius, Fiebre, Violin, fiesta de caro(chan)... Septiembre, Ella Fitzgerald, Fede(Allegro Moderato a full!), Mudanza, Fiesta de Maru(karaokee), Lecto con Rodrigo (el profee!!), Concierto en honor al """"Maestro Ruben DeLa Puente""""" (JUAJUAJUAJUA), Tango tinto en pocitos con historias de amor y tabaco, Ramblazo con Maxi (que buenas charlas che!!), Mucho violín, cumple de Ger(confirme que soy impresentable), Chivito en la venecia (La humanidad esta llegando a la encrucijada, o algo asi), Gusanito Manzana, Ohhh Cio Cio Sannn, Club social y deportivo Victoria... Octubre, Vivaldi, Matematica, Mamboo, Violin, Caro, Espacio Guambia, Dia del Patrimonio (toque en el callejon y Mamboooo), Zarzuela(Cara de Poker de Javier), Festival de Jazz de Audem(¡?), Beethoven, Flodo y Floto, No mas destaoriya (sniff...), Tabaco, Javier(todavía te debo un par de almuerzos!) , Violin, Musical, Concurso de piano (why, god, why??) Jean-Luc Ponty, Rocioooo, Cantando en el congreso, No mas banda... Noviembre, Rimsky-Korsakov, Mas Mambo, Hamburguesas en los de Eli, Maru y su primera experiencia al volante jajajajaja), Violin, Farolito, Matematicas, violin, mate, violin, tabaco, violin, Vino, Semana bizarra del año (Muere Panone, y otras cosas mas...auchs varios), Caro, Grapelli, cumple de Javier, Maru, Oscar Peterson, Cumple de Fede, Cumple de Lau y Alo, Vinicius... Diciembre, Hancock, Matematicas, Toque en tijuana con Belu (soy una fantasma... no, una Señora fantasma), Chet Baker, Destaoriya en el solis, Mucho mas Tabaco, Ensayos, Violin (x20), Mayra (que duo!!! Fuck them all!! We Ruleeeees!), Examen de Matematicas(salveeeeee, soy libreeee), Toque con mayra en el club uruguay(gran plotch) y en el farolito(todo un exito), Hombres plotch, Multiples reuniones en lo de Javi, El mejor 24 everr (mucha comida, paseo por la rambla), El mejor 25 ever (Reunion en lo de javi, salida a mariachi, si, mariachi... chanes multiples), Helado con Mayra en el centro (colosal sacada de cuero, no quedo titere con cabeza), Top 10 musicos Hot junior y senior, Tattttoooo, Gripe, Conversacion Bizarra con Ger, Per se!!! Mas gripe, violin, Garota de Ipanema (todo un hit), 31 en lo de los Martirena, salida con Maru, Drunken Gathering en casa (PLOOOTCHHH!!!! Linda forma de empezar el añooo!!!! Excelente augurio para el 2009!)

Ms. M
Valete